Fragmentos de INSOMNIO


Reflexiones sobre el proceso de trabajo.

Me ronda en la cabeza una idea…. más bien una pose.Yo soy muy del cuerpo humano, de su reflejo en tensión, esbozo y esbozo; lo estudio detenidamente y lo inserto en un contexto con el que se complementan en armonía o no, para que reflejen esa idea-imagen. 
 
Mucho boceto y boceto, me rompo la cabeza… la verdad que no me es tan fácil.
Titubeo, no soy para nada el típico genio talentoso.
Todo el proceso de la obra, desde su origen, me altera, me pone intranquila, impaciente... Entonces me largo al soporte, con el doble de tensión pero con convicción. Es ahí cuando la plasmo en obra.

...un pie...



Algunas poses...





Un tempo de dos miradas.

 

El paso del tiempo no se ve.
El paso del tiempo es nuestro reflejo.
El paso del tiempo es la vejez.
El paso del tiempo es la vida misma.
Es ahora…
Es un tiempo de dos miradas.




De cuando se me dio por la pintura...

 Me recuerdo un día, bastante frustrada por la materia cuando comenzaba el  3er año en la ESCUELA. Charlándolo con Julio, mi mentor y compañero de vida, me dice “esto es así….”

“Esto es así” significó una serie de pautas a seguir al encarar el trabajo en las clase de pintura con modelo vivo.

            




            Deje de lado mis prejuicios acerca del color y cuando lo llevé a la práctica me fascinó.

Todos los conceptos sueltos y aislados, que tenía en mi cabeza comenzaron a funcionar en conjunto, a fusionarse en una misma dirección. No se porque, solo se que ahí empezó mi verdadera relación con la pintura. Fue ahí cuando la imagen en el plano, pero no cualquier imagen o la que me salía, esa que yo quería representar, comenzó a aparecer. Y es desde ahí que quiero mostrar lo que hago. estas son unas de esas primeras imágenes.